Después de varias maquetas, y un directo, la banda se despide con este póstumo trabajo, aunque ellos digan que este es el “Acto -1º” quizás preparan un segundo acto… en forma de resurrección o de una nueva mutación de sus componentes.
Los Crisis Permanente recorren en doce temas como si fuera un viaje extraño, un curioso paisaje. Desde la revuelta en un internado, como si fuera una película de la “211” pasando por la basura en el amor y las drogas, la religión o la muerte.
Aunque ellos siempre odiaron las comparaciones, no faltan quienes ven vasos comunicantes entre este grupo valenciano, y grupos como eskorbuto, la polla, interterror o la banda trapera, incluso influencias de los pistols. Ellos ni afirman ni desmienten “nos importa un huevo, sale lo que sale cuando tocamos, lo que piense la gente es lo de menos y nos da igual”, quizás lo importante es el trasfondo y el mensaje que se encuentra en el, el nombre del grupo y el titulo del disco nos da las pistas “Los ricachones a la guillotina” y como ellos mismos gritan “viva el gremio de los cristaleros”. Si no los conoces puede que sea el momento de escucharlos.
Pedro García (Bellas Artes, U.V,)
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